
Fisioterapia manual instrumentalizada
Adicional al uso de las manos, antebrazos, codos y palancas realizadas con nuestro cuerpo, los fisioterapeutas utilizamos otras herramientas que completan la aplicación de la terapia manual, sea como ayuda al trabajo de las propias manos, o para lograr objetivos que solo con las manos serían casi imposibles de alcanzar, como la frecuencia vibratoria que logra una pistola de masaje neumático profundo o la presión negativa que se alcanza a través de las ventosas.
Presión negativa (Ventosas)
La presión positiva es la aplicada al hundir un tejido, por ejemplo con la mano. De esta forma las maniobras de roces, amasamientos, fricción,
percusiones, ejercen presión positiva sobre el tejido en mayor o menor medida.
Por el contrario, la presión negativa es la ejercida al tirar del tejido, por ejemplo, al intentar despegar la piel de las capas más profundas. Esto se
puede lograr con las manos en maniobras como de pinza o pinzado rodado, pero las ventosas son las herramientas para alcanzarlo durante más tiempo, con más intensidad y así potenciar sus efectos.
Indicaciones
– Cicatrices
– Adherencias
– Puntos gatillos
– Dolor miofascial
– Contracturas musculares
– Procesos que se favorecen al aumentar la circulación sanguínea
Fisioterapia instrumental
Entre las herramientas que ayudan a potenciar algunos efectos de la terapia manual están las herramientas Richelli’s, creadas por un fisioterapeuta español para facilitar el trabajo manual y alcanzar unas pinzas, formas y niveles de presión, intensidad y resistencia difíciles de alcanzar tan solo con las manos. Aclarando que la terapia manual instrumental no tiene por qué ser más dolorosa que la terapia manual convencional, y sus indicaciones son prácticamente las mismas para una que para la otra.
Masaje neumático profundo
Técnica que se aplica a través de una pistola de masaje neumático que genera una vibración intensa en forma de percusión en el tejido tratado.
Combina presión y vibración, cuya intensidad y frecuencia se elegirá dependiendo del objetivo planteado con el tratamiento.
Efectos y Beneficios
– Facilitar la reacomodación de la fascia.
– Inhibir puntos gatillo.
– Reducir el dolor.
– Normalizar sensibilidad.
– Efecto de sedación localizado.
– Relajar o activar la musculatura, dependiendo de cómo se dosifique.
Indicaciones
– Dolor muscular o miofascial
– Puntos gatillo
– Contracturas musculares
– Problemas de sensibilidad
– Activación muscular
– Descarga muscular